La famosa modelo trabajaba en el mundo del desnudo y ganaba mucho dinero con ello. Chloie admitió varias veces que le gustaba más posar desnuda, así que esa era su elección. Cuando conoció al mánager Jack, se dio cuenta de que lo suyo iba en serio. Después de pedirle matrimonio, el novio le dejó claro que estaba en contra de las sesiones de fotos desnuda. Clonie aceptó sus condiciones, porque amaba a ese hombre.
Jack solía desaparecer en el trabajo, por lo que la vida matrimonial no cumplió las expectativas de Clonie. Se sentía sola, ya que las ofertas de las marcas se habían vuelto muy escasas. Decidió organizar una sesión de fotos para su marido con imágenes picantes, pero solo entonces se dio cuenta de que no llevaba el anillo de boda en el dedo. El caso es que había posado en secreto sin ropa y se había quitado el anillo, y esta vez se había olvidado de ponérselo.
Cuando Jack vio en la foto que no llevaba el anillo de bodas, montó un escándalo. Sospechó que su esposa le estaba engañando. Sin embargo, tras una conversación franca con Chloie, el hombre comprendió que con su decisión había limitado su libertad y le había privado de algo que no solo le reportaba dinero, sino también alegría. Aceptó que su esposa era modelo de desnudos y le permitió seguir desarrollándose profesionalmente. Los grandes contratos le dieron a Chloie un futuro brillante, y Jack ya no dudó de la fidelidad de su amada.
¡Así es como una foto ayudó a poner todo en su lugar!
