El joven de 18 años, que supera los dos metros de altura, vive actualmente en la Casa Blanca mientras continúa sus estudios universitarios en Washington.
Suele mantener una vida completamente alejada del foco mediático y rara vez es noticia. Sin embargo, esta vez Barron Trump ha acaparado titulares tras disfrutar de una cita romántica en el imponente rascacielos de 58 pisos propiedad de su padre en Nueva York. Aunque el encuentro ya resulta llamativo, lo que más ha sorprendido es que para la ocasión se cerró por completo una planta del emblemático edificio, construido a comienzos de los años ochenta.
En la conocida Torre Trump, el joven de 19 años pudo disfrutar de un encuentro íntimo con una chica sin interrupciones, según revela Page Six. No obstante, el cierre del espacio no se debió a caprichos de lujo ni ostentación, sino a estrictas razones de seguridad. Como hijo del presidente de Estados Unidos, Barron debe estar siempre protegido por un dispositivo especial que garantiza su seguridad en cada uno de sus desplazamientos.
El único hijo en común de Donald y Melania Trump reside con ellos en la Casa Blanca, mientras cursa estudios de política, finanzas y economía en Washington. Allí mantiene un perfil discreto y apenas ha sido fotografiado en su día a día. Aun así, según algunos compañeros del campus de Greenwich Village, Barron goza de gran popularidad y despierta admiración entre sus compañeras. A pesar de su carácter reservado y tímido, muchos lo describen como un joven atractivo y encantador, cualidades que, junto con su estatura, le hacen destacar.
En lo que respecta a su círculo de amistades, su condición de hijo del presidente lo obliga a seguir ciertas normas de seguridad, como no compartir su número de teléfono personal con cualquiera. Para evitar filtraciones, suele comunicarse con sus amigos a través de plataformas de videojuegos como Xbox. “Esa es su manera de mantener el contacto”, señalan algunos estudiantes del centro. Son normas que Barron ha aprendido a respetar desde niño y que sigue cumpliendo con absoluta disciplina.
El menor de los hijos de Donald Trump —hermano de Donald Jr., Ivanka, Eric y Tiffany— nació el 20 de marzo de 2006 y ha empezado a tener una presencia más activa en la esfera familiar tras la segunda victoria electoral de su padre en enero pasado. Incluso ha acompañado al magnate en algunos de sus discursos. “Es un chico increíble: alto, guapo, un gran estudiante y apasionado de la política”, dijo Donald Trump sobre él en una entrevista. Tras esas palabras, algunos seguidores del líder republicano ya imaginan a Barron como un posible futuro presidente de Estados Unidos.
