Noelia López ha relatado por primera vez cómo vivieron ella y sus dos hijas aquel fatídico día en que el futbolista, de 35 años, y su primo perdieron la vida en un accidente de tráfico en Utrera (Sevilla).

Hasta ahora nunca había hablado públicamente sobre ello, comprensiblemente por el profundo dolor que aún le provoca recordarlo. Han pasado ya más de cinco años desde aquel suceso, tiempo en el que Noelia ha tenido que criar sola a sus hijas, enfrentándose al vacío y la nostalgia de no tener al marido y padre de las pequeñas a su lado. Con valentía y serenidad, la viuda de José Antonio Reyes ha decidido romper su silencio para contar cómo la muerte del querido futbolista andaluz transformó su vida de forma trágica e irreversible.
El 1 de junio de 2019 quedó marcado para siempre. Aquel día, el jugador falleció junto a su primo en un accidente de tráfico en Utrera (Sevilla), una noticia que conmocionó a todo el país y dejó completamente destrozada a su familia. En una entrevista concedida al programa Madres desde el corazón (Mediaset Infinity), Noelia recordó entre lágrimas cómo fue aquella jornada: “Fue muy triste para mí como esposa y como madre. La vida, tal y como la conocía hasta ese momento, se terminó”.
Cuando se produjo el trágico suceso, cuenta que “lo primero que pensé fue en mis hijas… ¿Qué iba a decirles? ¿Qué iba a hacer ahora?”. Sobre el momento en que se enteró, revela que “fue por una llamada telefónica, así, sin más”. Antes incluso, había escuchado sirenas en la calle —bomberos, ambulancia, policía—, ya que era verano y tenía las ventanas abiertas. “Me dio un vuelco el corazón. Pensé que había ocurrido un accidente, pero nunca imaginé que era él”, confiesa.

Tras el impacto inicial, relata: “Las niñas se me quedaron mirando y una de ellas me preguntó: ‘Mami, ¿qué le ha pasado a papi?’. Les dije: ‘Nada, cariño, que se tiene que ir otra vez lejos’, porque había estado jugando en China. Les puse una película en la televisión y me encerré en el baño para llamar a mi madre. Ellos ya venían de camino. Ya lo sabían. Fui la última en enterarme”.

“Sigo enamorada de José”
El duelo ha sido largo y doloroso. “No sabía si sería capaz de hacer felices a mis hijas por los dos, porque yo no elegí ser madre sola, y menos tan joven”, confiesa Noelia. En cuanto a la posibilidad de rehacer su vida sentimental, responde con firmeza: “No, ni me lo planteo. No necesitas tener a alguien al lado para ser feliz. Yo sigo enamorada de José, y mi tiempo es para mis hijas. No existe esa idea en mi cabeza, ni siquiera lo he intentado”.

Sin otra opción que mirar hacia adelante, la modelo encontró su fuerza en sus hijas, Noelia y Triana, que tenían 5 y 2 años cuando su padre falleció. Reconoce, además, que fue muy reconfortante recibir el cariño y los mensajes de apoyo de muchas mujeres anónimas que habían pasado por situaciones similares. “Esas historias me ayudaron a comprender que, aunque el dolor nunca desaparece, se puede seguir adelante”, afirma emocionada.