Mónica Hoyos ha acompañado a su hija Luna a la IX edición de los Premios Woman, donde una vez más dejaron patente la gran conexión y complicidad que existe entre ellas. Ante los micrófonos, madre e hija no dudaron en explicar el motivo de su presencia en una gala tan especial, la bonita relación que mantienen y los planes de futuro que Luna tiene para su carrera.
Madre e hija llegaron en perfecta sintonía al casino de Madrid para asistir a la IX edición de los Premios Woman Madame Figaro, donde Luna tenía un objetivo claro: poner en valor el trabajo de mujeres que inspiran. “Premian a gente que se lo merece”, comentó, añadiendo que estos reconocimientos “crean estructuras para quienes trabajan duro”. Un evento importante que hizo que la joven viajara desde Londres, donde cursa sus estudios, únicamente para aplaudir a referentes como Carolina Marín, a quien sigue como deportista, y a Sara García, cuya trayectoria le inspira especialmente por su papel como reserva para viajar a la luna.
Y no pudo hacerlo de mejor manera que de la mano de su madre, a quien definió como su mejor amiga. De nuevo, Luna habló con emoción de la profunda admiración que siente por la presentadora: “Llevo viendo el trabajo que hace desde que soy pequeña”, “nos entendemos”, “la admiro muchísimo como profesional”. Unas palabras que Mónica recibió con una sonrisa cómplice, devolviéndole el cariño al destacar la inteligencia de su hija. Incluso mencionó con orgullo los vídeos en los que Luna aborda temas políticos: “Las mujeres también tenemos algo en la cabeza, y hay que demostrarlo”. Así dejó claro que no todo pasa por la belleza y el maquillaje, sino también por cultivar otras facetas.
Entre risas, Mónica reconoció que lleva regular la distancia y que siempre intenta estar pendiente de Luna, aunque respetando su espacio personal. No en vano, su hija vive fuera de España desde 2022, cuando decidió comenzar sus estudios en la Universidad de Bath, en Inglaterra. Allí cursa Ciencias Políticas, una carrera que eligió por vocación y que le permite seguir creciendo y ampliando su perspectiva internacional. Todo ello refleja su inquietud académica y su interés por implicarse cada vez más en un ámbito que le apasiona.
De hecho, al ser preguntada sobre la posibilidad de presentarse a unas elecciones, Luna admitió que podría planteárselo, aunque todavía no tiene claro hacia dónde dirigir exactamente su camino. Lo que sí tiene seguro es que la política le encanta. Además, tan cercana como siempre, explicó qué la motiva: “Quisiera crear un ambiente en el que la gente pueda entender la política más allá de algo que creen que no les afecta”, “que tengan su propia opinión y tomen sus propias decisiones”. Unas declaraciones que evidencian la claridad de sus ideas y su carácter, y que, como ha señalado en más de una ocasión su madre, muestran que, pudiendo haberse dedicado al mundo televisivo, ha preferido construir su propio camino.
