«Hola, nietecitos, ¡somos sus abuelas!» ¿Qué tiene esta foto para haber provocado tantas discusiones y emociones? 😍🥰

Esta fotografía, que en cuestión de instantes se extendió por todo Internet, desató una auténtica tormenta de comentarios y polémicas. A simple vista no parece nada extraordinario: una imagen corriente de chicas jóvenes. Sin embargo, precisamente este cuadro стал motivo de acalorados debates, sobre todo entre la generación mayor.

La pregunta principal que muchos se hicieron fue: ¿de verdad esta toma se hizo en Rusia? En aquellos años el país se asociaba más bien con el trabajo duro en los koljoses y en las fábricas, y no con escenas tan ligeras. Algunos estaban convencidos de que no se trataba de nuestras abuelas, sino de europeas, tal vez muchachas de Londres en los años 70.

Hubo incluso quien aseguró reconocer en la foto a conocidas que supuestamente participaban en sesiones para una revista alemana. Otros, por el contrario, se entregaron a la nostalgia, recordando esas mismas minifaldas y los zapatos yugoslavos que en su momento se consideraban un verdadero lujo.

Es cierto que las minifaldas eran muy populares entonces, pero su escasa longitud a veces ponía a las chicas en situaciones embarazosas; por ejemplo, cuando tenían que salir a contestar frente a toda la clase junto a la pizarra.

Entre los comentarios también había muchos elogios: se hablaba de la belleza natural de las jóvenes y se subrayaba que sus figuras, sin siliconas ni retoques, mostraban únicamente lo que les había dado la naturaleza. Pero ¿por qué precisamente esta imagen provocó tantas discusiones? Tal vez porque consigue transmitir a la perfección el ambiente de aquella época.

Alguien incluso bromeó diciendo que a la foto le vendría bien la firma «neuroabuelas», insinuando que detrás de ella podría estar la mano de la inteligencia artificial. Aun así, ni siquiera ese chiste sería capaz de apagar los debates.

Y, sin embargo, hay un detalle que delata claramente la intervención de las redes neuronales: basta con fijarse en los dedos de las chicas. Su cantidad habla por sí sola.

Llegará un momento en que la inteligencia artificial aprenderá a corregir sin fallo este tipo de errores, y entonces la frontera entre lo real y lo falso desaparecerá por completo. La cuestión es: ¿cómo vamos a distinguir la verdad en esa nueva era?

Que nunca les falten la bondad y la buena vibra =)

«Hola, nietecitos, ¡somos sus abuelas!» ¿Qué tiene esta foto para haber provocado tantas discusiones y emociones? 😍🥰
En los años 80, la mayoría de las revistas escribían que envidiaban mucho su atractivo físico, ya que atraía a las mujeres. Ahora él mismo se ha estropeado la cara.