Elie Stotz, de 27 años, sufrió a menudo el acoso de sus compañeros de clase cuando era niña. Y es que Eli no se distinguía por su diminutividad desde muy pequeña. Ya a los 12 años, la estatura de la niña alcanzaba los 190 centímetros.
A Stotz le tomaban el pelo con un monstruo y con Godzilla.
Debido a las constantes burlas de sus compañeros y a las miradas curiosas en su dirección, Eli Stotz empezó a acomplejarse por su inusual aspecto.
Hoy, Eli Stotz mide más de dos metros. Pero la chica se deshizo de los prejuicios. Hoy es una modelo fetiche de éxito y ayuda a la gente a superar sus complejos.
Stotz recuerda: «Antes, la gente me hacía enfadar todo el tiempo. Los comentarios mordaces y el acoso se habían ido acumulando durante años: ……
Me volví muy ansiosa, sintiendo constantemente angustia por ser diferente. Pero al final, la humillación que sufrí sólo me hizo más fuerte.
Más tarde, Ali convirtió lo que ella creía un defecto en un punto fuerte. Stotz se convirtió en modelo de Amazon y empezó a ganar dinero haciéndose fotos con hombres bajitos y fetichistas.
«Ganaba buen dinero, y al principio era incluso interesante. Pero al final es completamente poco creativo. Me aburrí mucho: siempre lo mismo», cuenta Ali sus impresiones.
Sin embargo, la chica no niega que el modelaje le ayudó a sobrellevar sus complejos.
Hoy, Elie Stotz vive en armonía consigo misma y con su estatura. Sin embargo, admite que comprar ropa nueva es difícil: «Esté donde esté, me siento bendecida por ser así de alta.
Y a otras mujeres que se sienten inseguras de su aspecto, les aconsejaría que no les importe lo que la gente piense de ellas. Lo que importa es tu personalidad, no tu aspecto».