Se convirtió en una «Barbie» gastando una fortuna en ello.

La sueca Alicia Almira invirtió una considerable suma de dinero en numerosas operaciones de cirugía plástica con el objetivo de parecerse a una muñeca Barbie. Está convencida de que ahora se ajusta a su idea de la belleza y se considera la mujer más atractiva del mundo. Antes, su vida era bastante normal: trabajaba en una oficina y tenía un aspecto corriente.

Los cambios comenzaron cuando cumplió 21 años. Fue entonces cuando decidió dar el primer paso en el mundo de la cirugía estética, tras lo cual el camino hacia la perfección artificial se volvió irreversible. Alicia abandonó Suecia para comenzar una nueva vida en Gran Bretaña, donde empezó a cambiar su aspecto, convirtiéndolo en algo inusual y llamativo.

Durante una década, gastó enormes cantidades de dinero en diversos procedimientos, como aumento de pecho, operaciones de nariz, pómulos, mentón y mandíbula. Además, utiliza regularmente bótox, se rellena los labios y las mejillas, lleva pelucas llamativas, uñas largas y pestañas densas. Su vestuario se ha vuelto más atrevido y provocativo.

Si antes Alicia era una chica normal con rasgos suaves y casi sin maquillaje, ahora es completamente diferente. Ella asegura que ha cambiado radicalmente y que no tiene intención de volver a su aspecto anterior. Ahora vive como le gusta, sin preocuparse por la opinión de los demás.

El público percibe sus cambios de diferentes maneras: algunos admiran su valentía, otros condenan su elección. Sin embargo, Alicia afirma que para ella lo más importante es ser fiel a sí misma.