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**Claudia Schiffer vino al mundo el 25 de agosto de 1970 en Rheinberg, una pequeña ciudad de la antigua Alemania Occidental. En su juventud era una adolescente alta, tímida y algo desgarbada, muy lejos de la figura glamourosa que admiraría el público más tarde. En un principio soñaba con convertirse en abogada y trabajar en el bufete de su padre.**

Sin embargo, su destino dio un giro radical cuando, a los 17 años, un agente de modelos la descubrió en un club nocturno de Düsseldorf.

**Ascenso a la fama**
El gran impulso llegó cuando el legendario diseñador Karl Lagerfeld la acercó al mundo de la alta moda y la eligió como uno de los rostros de Chanel. Su parecido con Brigitte Bardot, unido a su belleza clásica y a una elegancia innata, hizo que rápidamente se convirtiera en una modelo muy solicitada.

Poco después empezó a presidir las portadas de las principales revistas de moda, como Vogue, Elle o Harper’s Bazaar, y su nombre se hizo familiar para todo el sector.

**La era de las supermodelos**
Durante la década de 1990, Claudia Schiffer se consolidó como una de las supermodelos más famosas del planeta, junto a Naomi Campbell, Cindy Crawford y Linda Evangelista. Era reconocida por su versatilidad, capaz de encarnar tanto la sofisticación de la alta costura como una imagen más comercial y cercana.

Claudia protagonizó campañas para casas de lujo como Versace, Dior y Guess. Su figura acabó asociándose al brillo y la opulencia del universo de la moda en aquella época icónica.

**Más allá de las pasarelas: cine y negocios**
Además de su trabajo como modelo, Claudia Schiffer se aventuró en la interpretación, apareciendo en películas como «Riquito Ricón» (1994) y «Zoolander» (2001). Aunque su carrera en el cine no alcanzó la misma relevancia que su trayectoria en las pasarelas, supo mostrar otra faceta de sí misma y su disposición a asumir nuevos desafíos.

Claudia también ha demostrado ser una empresaria muy perspicaz. Lanzó sus propias colecciones de ropa, gafas y fragancias, reforzando aún más su estatus como marca global. Estos proyectos tuvieron buena acogida y le permitieron mantenerse vigente e influyente en la industria incluso después del punto más alto de su carrera como modelo.

**Vida privada y labor solidaria**
En 2002, Claudia Schiffer se casó con el director británico Matthew Vaughn. La pareja tiene tres hijos y reparte su vida entre Londres y una residencia campestre en el condado de Suffolk. Pese a su enorme fama, Claudia siempre ha intentado proteger su intimidad, concentrándose en su familia y en sus compromisos profesionales.

También participa en numerosas iniciativas benéficas. Schiffer apoya programas centrados en la salud y la educación de los niños y actúa como embajadora de UNICEF. Su implicación en proyectos solidarios evidencia su deseo de contribuir y de generar un cambio positivo en el mundo.

**Legado e influencia**
Claudia Schiffer: una biografía marcada por la disciplina, la elegancia y la moda.

La influencia de Claudia Schiffer en el universo de la moda es incuestionable. Sigue siendo una de las supermodelos más emblemáticas de todos los tiempos, con una carrera que se extiende a lo largo de más de tres décadas.

**Su belleza que desafía el paso del tiempo, su profesionalidad y su instinto empresarial han fijado un estándar dentro de la industria. El legado de Claudia continúa inspirando a nuevas generaciones de modelos y a todos aquellos que aman el mundo de la moda.**

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