Los mejores looks de la reina Letizia en 2025, según nuestros expertos

Considerada una de las mujeres más elegantes de España, seleccionamos las elecciones de moda que han marcado este año

Este 2025, la reina Letizia se ha consolidado de nuevo como un icono absoluto de estilo y sigue siendo una de las mujeres más elegantes de España. Han sido 12 meses definidos por una elegancia práctica, salpicada de guiños a las tendencias, que se mueve entre la modernidad y un clasicismo depurado. Su armario ha combinado estrenos con una reutilización muy consciente de prendas y accesorios. Reafirmando su sofisticación y su gusto contemporáneo tanto dentro como fuera de nuestras fronteras, Luis Javier Merino, redactor jefe de moda, y Paula Callejo, redactora senior de moda en ¡HOLA!, eligen sus looks preferidos del año y los analizan al detalle.


Un vestido verde de tweed atemporal, por Luis Javier Merino

Verla de verde en el Día de la Hispanidad fue especialmente interesante, porque es una gama cromática que le favorece mucho y, además, proyecta una imagen serena, renovada y relajada si tenemos en cuenta los factores psicológicos asociados a este color. La pieza protagonista fue su nuevo vestido, un diseño con cuello redondo, manga tres cuartos, cintura ligeramente entallada y falda de línea trapecio con largo midi. Confeccionado en tweed, un tejido clásico que Coco Chanel popularizó en la década de 1920, su origen sigue siendo un enigma; de hecho, podría pertenecer a ese grupo de creaciones que se atribuyen a las modistas de palacio.

Con gran acierto en una festividad en la que ha ido mostrando una clara evolución de estilo, doña Letizia combinó el vestido verde con sus pendientes largos de esmeraldas de Tous, regalo de la firma española en 2022 con motivo de su 50º cumpleaños. En cuanto a los complementos, elevó el resultado al coordinarlo con accesorios en negro, logrando un conjunto “sosegado, elegante y respetuoso”. Así, definió la silueta con un fino cinturón de piel de Hugo Boss, volvió a lucir sus salones destalonados de Massimo Dutti y portó el bolso Victoria Insignia de Carolina Herrera, uno de sus modelos predilectos. Y, fiel a sus costumbres, no faltó su ya inseparable anillo de Coreterno.


Un collar que lo cambia todo, por Paula Callejo

Dame una joya histórica y me tendrás completamente conquistada. Este mes de julio, en los Premios de Periodismo de ABC Mariano de Cavia, Luca de Tena y Mingote, celebrados en Madrid, la Reina rescató una de las joyas de pasar que menos le hemos visto: un imponente collar compuesto por 37 perlas naturales que su suegra, la reina Sofía, sí lució en varias ocasiones durante las décadas de los 70 y 80. Fue un regalo de Alfonso XII a María de las Mercedes y se adquirió en San Petersburgo en 1877. En su origen pesaba 2.105 gramos y contaba con 41 perlas, cuatro más de las que tiene en la actualidad, ya que la reina Victoria Eugenia decidió prescindir de ellas.

Para que el collar acaparara todo el protagonismo, Letizia optó por un vestido negro sencillo pero bellísimo, de escote palabra de honor, una creación de Sybilla con la que se transformó en una versión moderna de Audrey Hepburn, extremadamente elegante y sofisticada. Me encantó su apuesta por el minimalismo, dejando que la joya brillara en primer plano y, al mismo tiempo, luciendo sus brazos tonificados.


Inspiración nupcial para las novias con espíritu vintage, por Luis Javier Merino

En septiembre se vivió un momento histórico: el primer viaje a Egipto de los reyes de España, don Felipe VI y doña Letizia, desde 2014. Allí, la Reina prácticamente unificó su maleta alrededor del blanco. Una apuesta por la pureza y la elegancia que alcanzó su punto álgido con el vestido de encaje de guipur sobre base de organza de seda natural que estrenó el miércoles 17 para la ceremonia de bienvenida en El Cairo. Este diseño de inspiración nupcial, perfecto para novias enamoradas de las creaciones vintage, es el modelo Lady White de The 2nd Skin Co., la firma capitaneada por Juan Carlos Fernández y Antonio Burillo, que se ha convertido en una de las favoritas de Letizia para sus looks más protocolarios en ocasiones especiales.

Aunque recuperó un bolso en tono a juego, quiso romper el efecto monocolor con los salones Carlota en tono caramelo suave, de Magrit. Al ser destalonados, aportaban ese matiz simbólico de su faceta más contemporánea. En el apartado joyas, y sin sumar nuevos estrenos, repitió con su anillo de Coreterno y sus pendientes Luzia de Gold&Roses, con forma de estrellas, una apuesta luminosa y muy personal.


El conjunto que inspiró mi look de Navidad, por Paula Callejo

El pasado 18 de noviembre, la Reina acudió al Premio de Periodismo Francisco Cerecedo en el hotel Ritz de Madrid con un estilismo que mi compañera Mariana Chacón describió como “la combinación que te pondrás en Nochebuena”. Y no podía estar más acertada, porque confieso que he decidido copiarlo para estas fiestas. Letizia se decantó por el burdeos, un tono en plena tendencia al que en los últimos meses se han sumado tanto celebrities como royals, y lució un look monocolor de lo más inspirador. Recuperó un jersey de cashmere de Falconeri, un diseño sencillo con cuello redondeado y manga larga, y lo combinó con una falda de lentejuelas hasta los tobillos de Massimo Dutti, una pieza capaz de transformar cualquier conjunto y dotarlo de un aire totalmente festivo y sofisticado.

De este look me gusta absolutamente todo: la mezcla de punto y lentejuelas es perfecta para esta época del año. Es moderno y estiloso, pero sin perder el espíritu clásico de la Navidad ni renunciar a la elegancia. Además, me encantó que añadiera joyas de eslabones dorados en tamaño XL; como decíamos, ella no suele llevar collar y parece que en 2025 ha empezado a incluirlos —aunque sea tímidamente— en sus estilismos. Este modelo de Parfois (15,99 euros) y los pendientes a juego (también 15,99 euros) aportan un toque muy contemporáneo. El peinado y el maquillaje, trabajados en los mismos tonos que la ropa, también me parecieron un acierto absoluto.


El look ochentero dulcificado que renueva su imagen, por Luis Javier Merino

Otra de las citas históricas que ha vivido la reina Letizia en este 2025 fue la imposición del Collar de la Insigne Orden del Toisón de Oro a su majestad la reina Sofía en el Palacio Real, el 12 de noviembre. Para esta ocasión, la esposa de un emocionado Felipe VI apostó por el rosa pastel y rescató uno de los conjuntos más singulares de su vestidor, con el que renueva su imagen habitual. En concreto, y tras lucirlo por primera vez durante su viaje a Italia en 2024, dio una nueva oportunidad a una chaqueta de tweed con hombros marcados y fascinantes bordados frontales, coordinada con una falda tubo. Perteneciente a la colección Otoño/Invierno 2024-2025, se trata de una propuesta de Wes Gordon para Carolina Herrera.

Aunque Letizia suele jugar con contrastes muy acertados, en esta jornada optó por un total look rosa al recuperar sus salones Carlota al tono, de Magrit, y un bolso a juego de la misma firma española. En lo que respecta a las joyas, volvió a confiar en el tándem formado por su anillo de Coreterno y los pendientes Luzia de Gold&Roses.


Su elegancia con mantilla en el Vaticano, por Paula Callejo

El 18 de mayo, mandatarios de todo el mundo se desplazaron hasta el Vaticano para el acto de bienvenida al Papa León XIV, que marcaba el inicio de su pontificado. En este tipo de citas, el protocolo de vestimenta es muy estricto, y me encanta observar cómo la reina Letizia adapta su estilo a esas normas. En esta ocasión, se acogió al llamado “privilegio del blanco”, que permite a determinadas reinas católicas vestir de este color en lugar del tradicional negro durante sus audiencias o actos oficiales con el Papa. Actualmente, gozan de este privilegio Letizia y Sofía de España, Matilde y Paola de Bélgica, María Teresa de Luxemburgo y Charlene de Mónaco.

Si ya es llamativo que optara por el blanco, el hecho de completar el look con mantilla lo convierte en algo absolutamente excepcional. A diferencia de otras royals europeas, doña Letizia no suele lucir accesorios en el cabello, más allá de diademas finas. Solo recurre a tocados o sombreros en actos internacionales cuyo dress code lo exige, como ocurrió en esta cita. Acompañó su impecable vestido de Redondo Brand —una pieza de escote redondeado, corte a la cintura y falda recta hasta los tobillos— con una mantilla clásica de encaje colocada directamente sobre la cabeza. Aunque quizá me hubiera gustado más con el cabello recogido, sabemos que no es especialmente partidaria de los moños. Completó el estilismo con unos pendientes de perlas y diamantes de Ansorena, que iluminaban su rostro y reforzaban esa imagen sobria, elegante y sofisticada que requería la ocasión. Sin duda, un look destinado a pasar a la historia.

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