La Reina de los Países Bajos vuelve a demostrar su maestría al elevar un conjunto clásico con complementos que marcan la diferencia

Apenas un día después de su visita al municipio de Zaanstad, donde rescató un vestido de tweed con botones dorados y acabado desflecado de Oscar de la Renta —una pieza que suele lucir cada otoño desde su estreno en 2021—, Máxima de los Países Bajos ha vuelto a acaparar todas las miradas.

La esposa del rey Guillermo Alejandro, que participará el próximo 27 de octubre en los festejos por el 750º aniversario de Ámsterdam, ha inaugurado hoy la 25ª Semana del Diseño Holandés en Eindhoven y la exposición Bridging Minds – 100x Design for Change. Además, tiene previsto visitar la nueva sede global de Royal Philips, en Ámsterdam. Para esta intensa jornada, ha elegido un vestido verde, un color que se ha convertido en el auténtico protagonista del otoño entre las royals.

El color verde conquista a la realeza
Los vestidos en tonos verdes se han consolidado como una de las tendencias más destacadas de la temporada. La propia reina Máxima ya apostó por este color el pasado 3 de octubre, durante la abdicación del Gran Duque Enrique de Luxemburgo y la proclamación de su hijo Guillermo, luciendo un diseño de Claes Iversen. Esa misma noche, su hija Amalia también brilló con un vestido verde durante el banquete de gala.

Otras monarcas se han sumado a esta tendencia: la reina Letizia lució uno en tweed con cinturón fino durante el Día de la Hispanidad; Matilde de Bélgica eligió un modelo floral en su viaje a Armenia; y la reina Camilla ha sido vista esta misma semana con un elegante diseño verde en el Festival Nacional de la Cosecha de Londres.

El color también ha conquistado a las royals más jóvenes: Kate Middleton lució recientemente un abrigo en verde intenso y, días antes, recuperó un traje oliva de Victoria Beckham; mientras que Victoria de Suecia apostó por un conjunto sastre en esta gama durante su visita oficial a Japón.
Un broche con sello español
En esta ocasión, Máxima ha elegido un vestido verde con cuello a la caja, manga tres cuartos, corte entallado y largo midi, una silueta clásica que estiliza su figura. Para personalizar su look, ha añadido un sombrero de terciopelo al tono —uno de sus accesorios fetiche— y un broche en forma de ramillete de flores blancas, una pieza delicada y romántica que aporta frescura y luminosidad al conjunto.

El broche, de estreno, es obra de la diseñadora española Luz Camino, reconocida internacionalmente por sus creaciones artísticas inspiradas en la naturaleza y con taller en Madrid. Una vez más, la reina de los Países Bajos demuestra su aprecio por el talento español.

Máxima y su dominio de los complementos
Con cada aparición pública, Máxima de Holanda confirma su dominio absoluto del lenguaje de la moda. Cuando no apuesta por estampados vibrantes o colores intensos, confía en los accesorios y las joyas para transformar un look sobrio en una propuesta llena de carácter.

Así lo hizo también durante su visita a Houten, tras regresar de Nueva York el mes pasado, donde sorprendió con un conjunto minimalista formado por un top tipo sudadera negra de Natan y pantalones blancos de corte amplio. Lo elevó con dos broches XXL de cristales con forma floral, reafirmando su capacidad para convertir los detalles en los grandes protagonistas de sus estilismos.

Con este último look, Máxima vuelve a recordarnos que la verdadera elegancia no está solo en las prendas, sino en cómo se combinan los accesorios y se les da vida.
