La foto está llena de emociones agradables, pero nadie tiene ni idea de lo que ocurrió realmente.
Esta foto del piloto y su familia se ha encontrado a menudo en la red. Fue tomada en 1974 por un periodista de la famosa Associated Press. La foto contiene un mensaje tan profundo y sentido que fue galardonada con el Premio Pulitzer. La foto muestra a un piloto estadounidense. Pasó cinco años cautivo en Vietnam y ahora por fin espera su liberación.
Se llama Robert Sturm. El piloto sabía por cartas de su familia que sus parientes, incluida su esposa Loretta, le esperaban en casa. Parte de la carta de su mujer incluso se publicó en algunas publicaciones.
Robert y Loretta se casaron cuando cada uno tenía 19 años. Pronto se convirtieron en padres de cuatro hijos e hicieron planes para el futuro. A nadie se le pasaba por la cabeza la idea del divorcio. Pero entonces, con el conflicto de Vietnam como telón de fondo, Robert fue reclutado por el ejército.
Pronto cayó en cautiverio, que duró 5 años. Afortunadamente, consiguió liberarse. Ocurrió después de que los estadounidenses se retiraran del territorio de Vietnam.
Cuando Robert ya estaba de camino a casa, recibió una carta de despedida de su mujer. El caso es que se retrasó un poco, porque había que ocuparse de cuestiones burocráticas tras la liberación. Robert nunca había pensado que Loretta quisiera el divorcio. ¿Su amor no podría soportar semejante prueba?
Tras este encuentro de lo más legendario, la pareja se divorció. Lo cierto es que Loretta distaba mucho de ser una esposa fiel. Ya después de un año de echar de menos a su marido, empezó a hilar romances con otros hombres. Durante este tiempo, le ofrecieron tres veces legitimar la relación. Sobre su vida personal la madre no contaba nada a los niños.
El tribunal decidió que los niños debían dividirse y que los fines de semana debían pasar tiempo juntos. La ex mujer quedó muy lejos de la ruptura. No sólo recibió una casa, un coche y una pensión alimenticia de 300 dólares al mes, sino también el 40% de la pensión militar de su ex marido.
Seis meses después, cada uno siguió su camino. Loretta se casó y Robert encontró un compañero de vida. Muchos usuarios de la red acusaron a la mujer de no haber sido fiel a su cónyuge, pero los comentarios de uno de los nietos de Sturm aportan claridad a la situación. El hecho es que la mujer ni siquiera se dio cuenta de lo que le había ocurrido a su cónyuge. Apenas sobrevivía porque tenía que mantener sola a los niños. Decidió divorciarse de él para empezar su vida de cero y encontrar un hombre que la ayudara a criar a sus hijos.
En 2010, Loretta murió. Su ex marido sigue gozando de buena salud. Y esta emotiva foto aún puede encontrarse en Internet. Es cierto que los detalles que hay debajo no son tan halagüeños como la primera impresión. Pero aun así: pase lo que pase, cree en esas personas cariñosas que siempre te esperarán y te apoyarán en los momentos difíciles.